viernes, 29 de julio de 2011

Luna












La luna, que pese a su ausencia durante el día, sabemos que anda arreglándose para representar su acción de todas las noches, que en momentos de soledad y oscuridad sólo basta con alzar la mirada para llenarnos de su luz, alimentarnos de su tranquilidad y dejar acariciarnos por toda su imagen.
Si tan sólo pudiéramos estar con ella, y dejar nuestras huellas en su tan suave arena blanca, que al mirarla se nos va la unión al planeta, como si voláramos con ella, ángeles acompañandola en las alturas.
La luna como esa mujer que tan sólo con mirarla, sabes todo de ella, que su silencio dice tantas cosas que te dejan mudo, la mirada se pierde en su luz.
Que fácil resulta ser adicto a tanta majestuosidad, y es que ella está tan lejos de nosotros pese a su grandeza, la luna, me da esa seguridad de que existe un Dios, porque algo como eso, sólo pudo ser creado por algo muy superior a nosotros, que tranquila se vuelve una tormenta, cuando mis ojos se ven penetrados en la luz de la luna y en la noche sombría.

viernes, 15 de julio de 2011

Carta. Para; Tiempo.

Quien te crees para pasar por aquí de esa manera tan inoportuna, llevándote todo lo bueno, dejándolo atrás, donde me es imposible alcanzarlo. Recuerdo cuando solías pasar sanando las heridas, haciéndome más fuerte, y dándome experiencia. ahora sólo me siento débil..
La única vez que te vi detenerte, fue en aquel beso, junto a ella, en la época dónde los árboles se sienten pesados de sus hojas y las sueltan todo el otoño, cuando los días eran invierno pero a su lado el corazón se sentía como en su hogar, caliente, suave..
Ahora pasas lo más rápido que puedes sin poder ni distinguir que llevas en tus hombros, que escondes en tus miradas, y que guardas en tus recuerdos, mírame sigo siendo el mismo, te pido que lo seas, dame esos días eternos y que cada segundo valga tanto como los próximos.

Tiempo, ¿que te parece si nos detenemos a mirar a todos pasar?, Te invito a envejecer a mi lado.